Defendiendo la carne de León.

El informe difundido por la OMS pone el foco en los riesgos cancerígenos de la ingesta de carnes procesadas y de carne roja, desatando las protestas de los ganaderos y las industrias procesadoras, que lo consideran falto de rigor científico. Así lo han asegurado a Efe tras reunirse las interprofesionales cárnicas del vacuno de carne, el porcino y el ovino-caprino (Provacuno, Interporc, Asici e Interovic) en un encuentro en el que han expresado su «malestar» por unas conclusiones que consideran «carentes de rigor científico».

Las organizaciones agrarias defienden la carne de León. La organización agraria Coag pide un análisis «sereno y pausado» y UPA llama a la calma, si bien ambas entidades han criticado el alarmismo «injustificado» creado a su juicio por la OMS y defienden la calidad de sus producciones.

En el caso de la Federación Española de Hostelería (Fehr) prevé que el estudio «no tendrá impacto negativo en el negocio» y remarca que «lo que tiene riesgo es un abuso indiscriminado y habitual de este tipo de productos», ha afirmado su secretario general, Emilio Gallego.

Empresas como MacDonald’s o Buger King, que pertenecen a la Federación Española de Restauración Moderna (Fehrcarem), declinan hacer declaraciones sobre el posible impacto económico en sus cuentas.

Tampoco grandes empresas cárnicas (como Campofrío o El Pozo) se pronuncian de forma individual y remiten a la patronal que los representa, la Asociación Nacional de Industrias de la Carne (Anice). La cárnica es una de las principales industrias españolas, que genera 22.168 millones de euros y 80.979 empleos directos.